Estos son mis sobrinos Felipe y Benjamín y su cara de felicidad cuando los llevan a recolectar café. Varias veces en la temporada , han participado y varias cajuelas han recolectado . Y Felipe feliz al final de cada jornada , recibe su pago. Mis sobrinos tan pequeños saben y van comprendiendo el valor del trabajo. Aman levantarse temprano para ir a la jornada , mi hermano Javier y Nathy mi cuñada , están educando no solo a niños que saben amar y proteger a los animales , si no a niños que saben contemplar , aprender , esforzarse y soñar por alcanzar lo que quieren. Gracias a esa formación que no es 24 /7 frente a juegos electrónicos y computadoras , mis sobrinos están creciendo amorosos , soñadores, valientes y conscientes.
