Creo firmemente que todo el tiempo estamos expuestos a magia y belleza, incluso en los lugares menos sospechados. Como el diente de león, que le gusta surgir en los espacios menos esperados, y no sé ustedes, pero a mí esta plantita todavía me inspira a pedir un deseo. Por tanto, sí, es magia esparciéndose en medio del aire y entre el ruido de la gente, magia envuelta en semillas blancas que danzan si hay viento, magia pura sin importar qué.