Por cada árbol talado,árbol sembrado.
Por cada bosque quemado,bosque repoblado,
por cada lágrima, mil risas,por cada herida, un abrazo.
Que se abran los corazones y las manos,que se rompan las aceras y se hundan los muros humanos¡
que se mueran todos los miedos!
Y nazcan de nuestros desiertos brotes nuevos de esperanza,flores rebeldes de Libertad.
Sigamos caminando, corazón,sigamos caminando,
que la vida es muy corta y el camino muy largo… Ada Luz Márquez